5 conseils pour une vie sexuelle épanouie GOLIATE

5 consejos para una vida sexual plena

¿Cuáles son los secretos de una vida sexual sana? ¿Cómo divertirnos y aprovechar al máximo los momentos de sexo que ambos compartimos? Aquí hay 5 claves que te abrirán muchas puertas.

Ya no busco el orgasmo a toda costa

Si solo pienso en disfrutar, mi cerebro solo se concentra en el propósito de la relación sexual. Sin embargo, durante el amor pasan muchas cosas: su piel contra mi piel, sus manos entre mis muslos, su aliento entre mis piernas... ¡Disfrutar del viaje es mejor! Al vivir en el momento presente, sin apartar la mirada, tengo más posibilidades de alcanzar el orgasmo. Será más sorprendente y más fuerte, gracias a las mil sensaciones encontradas en el camino.

no pretendo

Soy bueno fingiendo. Cuando no es mi noche, finjo que lo es. Y cuando sus caricias no me hablan, finjo que hablan. Así no ofendo a mi pareja y todos contentos. Error ! Es mejor decir las cosas. Guiar al otro hacia nuestros deseos del momento para disfrutarlos más. Sin sonar como el director de una escuela, le sugiero gentilmente... una misionera, porque estoy en un estado de ánimo misionero. Acompaño sus manos en mi clítoris cuando son torpes y sugiero apagar la luz si eso me conviene más.

No estoy participando en una competencia.

No estoy aquí para tener sexo diez veces a la semana y superar el promedio nacional. Ya no encadenar diez posiciones cada cuarto de hora porque eso se hace en las películas porno. El sexo me hace feliz cuando lo vivo a mi manera, sin contar, sin cronometrarme y sin compararme. Así que no importa que los vecinos hagan temblar el edificio todas las noches si lo que me hace sentir bien es prenderle fuego una vez al mes.

no me quedo en mis logros

A menudo me digo a mí mismo que he hecho el truco y que mi sexualidad es una rutina. Quizás sí, mis relaciones sexuales se suceden y se parecen. Sin embargo, hay muchas cosas por descubrir. La sexualidad es un vasto campo en el que siempre hay algo por descubrir. Una nueva posición, un nuevo juguete, un nuevo lugar, una nueva zona erógena… Voy a por ello. La promesa: ¡nuevas sensaciones nunca antes experimentadas!

no pienso en mis preocupaciones

¡El sexo es un momento de compartir y alta relajación! Pero es cierto, cuando he tenido un mal día, más que disfrutar del momento sexual, me detengo en mis preocupaciones. Hay que hacer la compra, pagar los impuestos, sacar la basura. Ciertamente. Pero no tiene sentido pensar en eso durante el amor. Porque los contenedores no se vaciarán en plena penetración. Pospongo mis preocupaciones para abandonarme ahora, enseguida, y sentir como las manos de mi pareja sobre mí son pequeñas alegrías.